13 señales de una amistad que anda mal

Sarah & Kelsey son "mejores amigas". Se conocieron cuando Kelsey entró en el dormitorio universitario de Sarah para tomar prestado un libro de su compañera de habitación y se dio cuenta de que Sarah estaba viendo su película favorita. Cuarenta minutos más tarde, después de discutir varias líneas de la trama y simular algunas de las escenas favoritas de la película, se hicieron amigas rápidamente. Despacio, con el tiempo, ellas hicieron todo juntas – estudio bíblico, rendición de cuentas y, finalmente, la foto de perfil de Facebook con la etiqueta de “mejores amigas” lo hizo oficial.

Sarah & Kelsey comenzaron a ver cada vez menos a sus demás amigas. La facilidad con la que esa amistad llegó a ellas era conveniente y divertida. Empezaron hablando cada día, compartiendo emociones y sentimientos, incluso orando la una por la otra. Eventualmente, Sarah no sentía que su día estaba completo hasta que no hablaba con Kelsey. Cuando Kelsey tenía un día difícil, inmediatamente le enviaba mensajes de texto a Sarah en busca de consuelo. Ella sabía que Sarah oraría por ella de cualquier manera. Era difícil para ellas imaginarse lo que era la vida antes de que ellas fueran mejores amigas.

Entonces un verano, todo cambió. Sarah se fue a un viaje de misiones con su iglesia y conoció a otra amiga, Amy. Cuando Kelsey llamaba para hablar con Sarah, a veces ella estaba pasando el rato con Amy y sus demás amigos misioneros. O cuando ella invitaba a Sarah, ella llevaba a Amy consigo. Ya no era más Sarah & Kelsey. Los celos intensos de Kelsey eran abrumadores e insoportables. Ella se sentía traicionada, herida y enojada.

Esta es la historia de una amistad que andaba mal. En algún lugar del camino, Kelsey comenzó a buscar a Sarah para cosas que solo Dios podía darle: valor, propósito, pertenencia y seguridad. Esta es la historia de una amistad infectada por la idolatría. Y eso pasa con demasiada frecuencia.

La primera mentira

Desde que la serpiente abrió su boca por primera vez en el jardín, ha tratado de convencernos de que Dios no es suficiente para nosotros: “Estás perdida. Él está mintiéndote” (Génesis 3:1-6). Ahora, la tentación de mirar la creación de Dios en vez de a Dios mismo para satisfacción propia es una lucha común y diaria.

Cualquier cosa que busquemos para nuestra satisfacción que no sea Dios es un ídolo. Las formas más sutiles de idolatría suceden cuando ponemos cosas buenas por encima de Dios. El matrimonio es algo bueno. Pero cuando lo necesitamos mas que a Dios, es un ídolo. Los niños son algo bueno, pero cuando los necesitamos mas que a Dios, son ídolos. Los amigos son algo bueno, pero cuando los necesitamos mas que a Dios, también son ídolos.

La mayoría de los cristianos asumen que las amistades nunca pueden ser pecaminosas, especialmente amistades del mismo género. De hecho, si tú necesitas a tu mejor amiga más que a Dios, raramente se notará o incluso se consideraría como algo malo. Una mejor amiga puede convertirse en un dios, una salvadora funcional la cual te rescata de las dificultades de la vida, y nadie llamará a eso pecado. Es por esto que la idolatría en las amistades es peligrosamente engañosa. Es culturalmente aceptable necesitar tus amigas más de lo que necesitas a Dios.

Pero cualquier cosa que le quite el lugar de Dios en tu corazón se convierte en un ídolo, incluso tu más cercana amiga.

Todo lo que necesitamos es Dios

Por favor escúchame, Dios nos creó para tener comunidad. Necesitamos desesperadamente amigas sanas, de confianza y piadosas. Verdaderamente, no es bueno que el hombre esté solo. Pero cuando cualquier cosa buena o incluso necesaria es elevada por encima o hasta al mismo nivel que Dios, eso es idolatría:

  • Dios nos creó para necesitar alimento y agua para señalarnos hacia Él, el Pan de Vida y la Fuente de Agua Viva. (Deuteronomio 8:3)
  • Dios nos dio Su Palabra escrita, la Biblia, para señalarnos hacia Él: el Verbo hecho Carne. (Juan 5:39-40)
  • Dios nos creó para estar en comunidad para señalarnos hacia Él: la Trinidad (Salmos 73:25-26)


Señales de idolatría en la amistad

Aquí hay trece señales de que podrías estar en una amistad dañina e idólatra:

1. Experimentas celos frecuentes y tienes sentimientos posesivos y de exclusividad con una amiga (ser su mejor amiga). Además, ves a las demás personas como una amenaza a tu relación de amistad. 

2. Prefieres pasar tiempo solo con esa amiga y te frustras cuando eso no sucede.

3. Pierdes interés en otras amistades.

4. No estás dispuesta a hacer planes ni a corto ni a largo plazo si eso no incluye a tu amiga.

5. Con frecuencia te refieres a ella en conversaciones.

6. Te sientes libre de “hablar por ella”.

7. Usas halagos y elogios con frecuencia, como: “tú eres la única que me entiende” o “yo no sé qué haría sin ti”.

8. Tienen apodos para cada una y se refieren a cosas que tienen un significado especial para ustedes, y/o tienen su lenguaje secreto.

9. Frecuentemente necesitas su “ayuda” para crear o exagerar problemas con el fin de ganar atención o simpatía.

10. Exhibes intimidad física con esa amiga que hace que otros se sientan incómodos o avergonzados, incluyendo, pero no limitándose, a abrazos frecuentes, tomadas de manos, tocarse, frotadas en el cuello y espalda, cosquillas, acurruques, toques coquetos y juguetones, etc.

11. Carecen de una medida apropiada de modestia la una con la otra: con frecuencia estando desnudas cerca de la otra, etc.

12. La haces sentir culpable sobre expectativas no satisfechas diciendo: “iba a llamarte anoche, pero sabía que probablemente estarías muy ocupada para molestar conmigo”.

13. Quebrantas sus otras relaciones convenciéndola de que a sus otras amigas no les importa o te haces amiga de todas sus demás amigas para así poder controlar la situación.

El camino de salida

El arrepentimiento es siempre la vía de salida del pecado. Eso comienza estando de acuerdo con Dios al llamar nuestra idolatría por lo que es: pecado. “Me dejaron a mi, fuente de agua viva, y cavaron para sí cisternas, cisternas rotas (amigas) que no retienen agua”, Jeremías 2:13. ¡Vamos a arrepentirnos de poner amigas en el lugar que solo Dios debe estar y volvámonos a Él en fe y humildad, pidiéndole que nos salve, nos libere y nos satisfaga con Él mismo!

Por Kelly Needham

Loading controls...