La memorización de la Biblia puede profundizar nuestra relación con nuestro Creador de muchísimas maneras.
Es por eso que la Biblia dice: “En mi corazón he atesorado tu palabra, para no pecar contra ti”, Salmo 119:11.
Mi diaria memorización de la Biblia se ha convertido en una de las mejores maneras en las que Dios me enseña sobre Él y sobre Su voluntad para mí. Pero, ¿por qué y cómo memorizamos la Palabra de Dios?
Cuatro motivos para memorizar la Biblia
1. Me ayuda a pensar sobre la Palabra de Dios a lo largo de todo el día.
"¿Cómo puede el joven guardar puro su camino? Guardando su palabra", Salmo 119:9.
No tengo tiempo para leer mi Biblia del amanecer al anochecer. Así que, ¿cómo medito en la Palabra de Dios todo el día? Cuando estoy memorizando activamente, esos versículos se convierten en la banda sonora de mi vida y puedo meditar en la ley de Dios sin tener mi Biblia frente a mí, como cuando estoy en el carro, tomando una ducha o de camino a la escuela.
2. Me ayuda a depender de Dios
"Por tanto, no os preocupéis por el día de mañana; porque el día de mañana se cuidara de si mismo. Bástele a cada día sus propios problemas", Mateo 6:34.
Cuando lucho con la ansiedad, es generalmente porque no estoy haciendo espacio en mi vida para permitir que la provisión de Dios me llene todos y cada uno de los días. La memorización y meditación de un versículo cada día me conecta con Jesús cada día. Puedo sentarme a Sus pies y escuchar Sus palabras antes de enfrentar el mundo.
3. Aumenta mi pasión por la Palabra de Dios
Conocer de corazón porciones de la Palabra de Dios me hace más consciente de la belleza de Su palabra. Me encuentro con hermosos pasajes, sermones asombrosos y lesiones aplicables en cada versículo. ¡Cuando siento la utilidad y la belleza de la Biblia, me emociono más de sumergirme más profundo y leerla más!
4. Construye mi arsenal para luchar contra las mentiras de Satanás
Cuando Jesús fue tentado por Satanás en el inicio de Su ministerio (Mateo 4:1-11), Él se defendió usando pasajes de la Escritura que había memorizado. De un modo similar, cuando estoy memorizando, aprendo lo que Dios tiene que decir acerca de una variedad de situaciones en mi vida y puedo luchar con la verdad de Dios las mentiras de Satanás.
Es por eso que memorizamos las Escrituras, pero ¿qué hay del “cómo”? Aquí te muestro cómo lo hago.
Cómo memorizo la Biblia
Esta es la técnica que yo uso:
- Comienza cada día repasando el versículo del día anterior diez veces en voz alta de memoria.
- Recita lo que has memorizado hasta ahora de memoria.
- Para memorizar un versículo nuevo, léelo diez veces en voz alta de tu Biblia y luego recítalo diez veces de memoria.
Esta técnica me toma no más de veinte minutos cada noche. ¡Ármate de valor! Lo que parecerá monumental cuando comiences, se volverá pequeño cuando te enfoques en lo que Dios quiere hablarle a tu vida cada día.
Por Sadie
