Hemos hablado sobre acudir a las personas que conoces que han tenido éxito en alguna área de su vida, pero hoy quiero hablarte de las personas que pueden estar impidiendo que llegue la ayuda que necesitas y de las que sería mejor alejarte.
Así como hay quienes pueden brindarte un buen consejo, hay otras que pueden destruirte. Puede ser un amigo, un familiar, un conocido, etc. Muchas veces no nos damos cuenta, porque no nos detenemos a reflexionar si esa relación realmente nos aporta valor o no. Puede que incluso te estén alejando de Dios sin que lo sepas, llevándote a hacer cosas que no te gustan o que no le agradan al Señor. ¡Ten cuidado si es así!
La Biblia te dice hoy en Proverbios 13:20:
“Camina con sabios y te harás sabio; júntate con necios y te meterás en dificultades.”
Así que uno de los factores para determinar si puedes recibir la ayuda que necesitas será tu capacidad para desconectarte de las malas relaciones y conectar con las correctas.
Es probable que esto sea doloroso y difícil para ti si existe algún tipo de apego emocional, puede que incluso estés esperando un cambio en esa persona cuando ni siquiera está en sus planes cambiar. Pero hoy te animo a que enfrentes la situación y ores para que Dios te diga qué hacer. Analiza tu relación con esa persona y evalúa hasta dónde te ha llevado.
Toma la decisión correcta para ti, para tu familia y para tu futuro. Elige bien; porque Dios tiene mucho para ti y es posible que alguien en tu vida te esté robando tu bendición.
