Una de las cosas más difíciles en mi vida es caminar en la promesa eterna de Dios de que Él terminará lo que ha comenzado en mí. Muchas veces dejo que el fracaso, la ansiedad de cada día o el tratar de tomar control de mi vida se lleven lo mejor de mí.
Y de pronto ¡BOOM! Dios me habla a través de versos como estos: “Todo lo que Dios ha prometido es sellado con el Sí de Jesús. En él, esto es lo que predicamos y oramos, el gran Amén, el Sí de Dios y nuestro Sí juntos, gloriosamente evidente. Dios nos afirma, haciéndonos una cosa segura en Cristo, poniendo su Sí dentro de nosotros. Por su Espíritu nos ha sellado con su promesa eterna – un comienzo seguro de lo que está destinado a completar”, 2 Corintios 1:20-22 (MSG, Traducción).
Hoy pido que Dios nos dé una pasión para caminar confiados en todas las promesas que nos ha dado, con una fe inamovible por todas esas cosas que Él nos ha prometido, por todos esos sueños de Él para nosotros que hará realidad en nuestras vidas. Que borre toda duda, todo “NO”, y lo selle con Su “SÍ”.
Que nunca olvidemos que Jesús se hizo hombre y vino a esta tierra para poner su “Sí” dentro de nosotros. Que tenemos que vivir no para ganar la victoria, sino que ya vivimos en victoria, porque al morir en esa cruz, al resucitar y al dejarnos Su espíritu santo, nos dio la victoria y ¡lo mejor está por venir para nuestras vidas!
Dejemos que Dios nos afirme con Sus palabras, con Sus promesas. Acerquémonos más y así vamos a ver que Él terminará lo que ha comenzado en nuestras vidas. Proclamemos esos “Sí” que Él ya nos ha dado y caminemos llenos de fe y expectativa seguros de nuestra identidad en Él, de lo que Él nos ha llamado, por lo cual Dios nos ha escogido.
Que cuando la ansiedad, la depresión, los pensamientos negativos, el fracaso o la vergüenza vengan, podamos gritar a todo dar: ¡ESTOY SELLADO CON EL SÍ DEL DIOS QUE DESAFÍA TODO LO IMPOSIBLE!
