He dicho antes que Dios no te bendecirá más allá de tu último acto de desobediencia. Sin embargo, cuando le obedeces estás en una buena posición para ser bendecido.
En Miqueas 6:1-8 se explica de nuevo al pueblo de Israel lo que debían hacer para obedecer al Señor, y la respuesta era mucho más sencilla de lo que intentaban adivinar...
"¡No! Oh pueblo, el Señor te ha dicho lo que es bueno, y lo que él exige de ti: que hagas lo que es correcto, que ames la compasión y que camines humildemente con tu Dios." (v.8)
Verás, la clave para caminar con Dios es la fe, de lo contrario, ¡nos desmoronamos cuando dejamos de tenerla porque empezamos a dudar y a tener miedo!
Recuerda que la Biblia está diseñada para tu beneficio al proporcionarte soluciones para los problemas de la vida. Pero nunca te beneficiará, o proporcionará soluciones, si no ejerces tu fe. Hagas lo que hagas, tienes que tener a tu fe involucrada.
Piensa por un momento si has hecho exactamente lo que Dios te dijo que hicieras. Se necesita algo más que escuchar algunas predicaciones para cambiar tu vida. Se necesita aplicar su Palabra. Asi que cuando Dios te pida hacer algo, ¡simplemente hazlo!
"«Mis justos vivirán por la fe. Pero no me complaceré con nadie que se aleje». Pero nosotros no somos de los que se apartan de Dios hacia su propia destrucción. Somos los fieles, y nuestras almas serán salvas." (Hebreos 10:38-39)
