Una conducta digna

“Pregunta:

Mi madre insiste en que mi conducta es indigna del cristianismo. Cuando le pregunto por qué, no me sabe contestar. Solamente dice que mi manera de hablar, mis amistades y ciertas cosas que hago son indignas, e insiste en decir tal frase. Al fin de cuentas, ¿qué es una vida digna, y qué es una conducta indigna para que mi madre me diga que yo no soy cristiano?”

Respuesta:

Mi estimado joven; comprendo que a los diecisiete años es fácil disentir con la madre de uno. Ahora bien, ¿qué puede hacer un muchacho de su edad para vivir de tal manera que su madre no le acuse de una conducta indigna y que a su vez usted tenga la convicción interna de que su conducta en verdad es digna, correcta y cristiana?

Primero, dice San Pablo en Colosenses capítulo 1: "Que sus vidas agraden y honren al Señor, que siempre hagan el bien a los demás, que cada día conozcan mejor a Dios". ¿Qué es una vida digna y qué es una conducta indigna? Joven, el primer paso es éste: cuando es digna de nuestro Señor Jesucristo. Pregúntese ¿mi vida le agrada por completo al Señor? Quizá mi madre no me comprende, pero ¿qué dice el Señor que conoce mi corazón?

Segundo, el versículo también declara que usted tiene que fructificar "haciendo el bien a los demás". Quiere decir que en lugar de ser negativo en su conducta, en lugar de tratar de defenderse a sí mismo ante su madre, sus amigos o ante otros cristianos, usted debe vivir una vida tan buena que hable por sí sola. Usted debe vivir de manera que cuando otros lo observen, lo admiren.

Y luego, en tercer lugar dice "que cada día conozcan mejor a Dios". Si usted aprovecha para crecer en el conocimiento de Dios, nadie podrá acusarlo de una conducta indigna.

Sin embargo, usted como joven seguramente sufrirá muchos ataques, muchas tentaciones, muchos problemas que vienen de afuera. ¿Cómo puede defenderse? Dice la Biblia en Efesios 6:11, "Vístanse de toda la armadura de Dios, para que puedan resistir las asechanzas del diablo". 

Joven, usted sin duda siente tentaciones y problemas, y sólo podrá defenderse vestido de la armadura completa que Dios nos da. Además llenando su mente de la Palabra de Dios y comenzando cada mañana con un buen rato de oración a Dios preparándose para las luchas del día. Camine con el poder interno que el Espíritu de Dios le quiere dar. Lea Efesios 6:10 al 18. Estimado joven, de esta manera su conducta será digna.

Por último le recomiendo que se acerque a su madre y le diga: "Madre, perdóname que he vivido de manera indigna según tú. Quiero ser un muchacho digno, un hijo que te honre y que honre a Dios. Ayúdame para caminar como debo". Así notará cómo vuelve el amor a su relación con su madre.

Loading controls...