Todo evento natural o social que interrumpa negativamente el curso de la historia de la humanidad es parte de la vida. Y ninguno de nosotros escapará a esa realidad de decepción, frustración y tragedia que encontraremos mientras estemos vivos. Seremos afectados porque a pesar de ser individuos, vivimos en grandes comunidades que influyen en nosotros.
Sin embargo, a través de todo este tiempo, ha sido mi deseo poder brindarte las Herramientas necesarias para que puedas controlar tus respuestas ante situaciones como la que vivimos ahora con el coronavirus; situaciones llenas de incertidumbre y miedo que no debes permitir que mermen tu fe.
Recuerda que esta no es la primera vez que el mundo enfrenta una crisis, y que tus padres y abuelos han salido victoriosos gracias al amor y el cuidado de Dios. Ahora te toca a ti ser esa generación que venza las luchas de su tiempo, que sea fuerte y que no se deje llevar por el miedo. Proverbios 24:10 tiene un mensaje contundente para ti para estos días:
Si fallas bajo presión, tu fuerza es escasa.
Así que activa tu capacidad de controlar y manejar las dificultades mediante la fuerza interna que Dios colocó en ti, y refuérzala todos los días manteniendo una vida de oración y escudriñamiento de su palabra.
Y recuerda siempre que puedes elegir entre el colapso emocional, o decidir ver más allá del caos, hacia ese horizonte lleno de oportunidades que el Señor tiene para ti, porque esto, aún no es tu fin. ¡Creélo!
