“Queridos hijos, que nuestro amor no quede solo en palabras; mostremos la verdad por medio de nuestras acciones.” (1 Juan 3: 18 NTV)
“No finjan amar a los demás; ámenlos de verdad. Aborrezcan lo malo. Aférrense a lo bueno.” (Romanos 12:9 NTV)
Después de escuchar el devocional, medita en los siguientes puntos:
Esta mañana me levanté pensando...
…en que el amor cobra sentido solo cuando se manifiesta, se demuestra, se activa o se lleva a la practica en el diario vivir.
1. Pregúntate: ¿Alguna vez has amado solo de labios para afuera? ¿Puedes recordarlo? La gran mayoría de nosotros en algún momento hemos hablado muy bonito, pero cuando vamos a la acción no hay nada.
2. Piensa un momento en lo que significa fingir amar. Fingir no es otra cosa que aparentar. ¿Estaremos fingiendo amar lo que hacemos? ¿Estaremos fingiendo amar a los que nos rodean o nuestro trabajo?
3. Cuando el ser humano finge amar no puede perdonar, jamás podrá experimentar un verdadero impacto en los que le rodean, no podrá ver un fruto que le satisfaga, las cosas no saldrán bien y su alcance será mínimo.
4. El amor fingido toma decisiones a la carrera sin medir las consecuencias, sacrifica amistades y relaciones valiosas, se ofende fácilmente y no se deja corregir, retrocede con facilidad en los retos de la vida, no ve las oportunidades que Dios le presenta, se cansa fácilmente, no lucha y es dañino.
5. Renunciemos a las apariencias y que Dios nos ayude a no fingir amar en ningún área de nuestra vida. Desechemos las apariencias y no le demos lugar al amor fingido en nuestro caminar. El Espíritu Santo nos enseña a amar con sinceridad y honestidad.
