“La ley es santa, y el mandamiento es santo, justo y bueno… la ley es espiritual… estoy de acuerdo con la ley, reconociendo que es buena”, Romanos 7:12, 14, 16
No hay manera de separar la ley moral de la ley de Dios, a menos que sea a través de la ética situacional que vemos en nuestra generación.
Dios estableció las leyes morales. Los Diez Mandamientos son simples, sencillos y absolutos. Si usted los sigue, deberá seguir la ley moral.
C. S. Lewis escribió: "La moral es indispensable: pero la vida Divina, que se da para nosotros y que nos llama a ser dioses, nos propone algo en lo cual la moralidad será tragada. Tenemos que ser hechos de nuevo".
En nuestra sociedad hemos adoptado la ética situacional. Básicamente esto significa que los tiempos y las situaciones dictan la moral. Por lo tanto, si todo el mundo cree que el aborto está bien, entonces lo es. O si todo el mundo dice que la homosexualidad es aceptable, lo es.
Cuando se trata de la moral, la Palabra de Dios es clara y penetrante. Lo correcto es correcto y lo malo es malo.
Es evidente que a nuestra sociedad "iluminada" le podría servir una buena dosis de los absolutos bíblicos de Dios. Me duele ver que los jóvenes de esta generación han sido engañados por la "ética situacional".
Ore para que el Espíritu Santo le guíe a ser puro moral y espiritualmente.
Lectura Bíblica Diaria
Isaías 48-51
